viernes, 26 de noviembre de 2010

Las Navidades en República Dominicana

Navidad en Republica Dominicana
El aire navideño comienza a sentirse en noviembre con los adornos y decoraciones que aparecen en las casas, comercios, instituciones y demás establecimientos. Las estaciones de radio empiezan a tocar tonadas navideñas y desde inicios de diciembre las empresas celebran sus esperadas fiestas navideñas, donde comparten empleados y dueños y administradores, con sorteos, abundante comida, bebida, músicas y baile.
En las iglesias se prepara un altar con el Nacimiento simbólico y en las casas se coloca el Nacimiento (representación del Pesebre) junto al tradicional Árbol de Navidad. En República Dominicana se le llama "Nacimiento" al "Pesebre" o la representación que se hace con figuras del nacimiento de Jesús. A diferencia de otros países, en el Nacimiento se coloca la figura del bebé desde el mismo momento en que se arma el Nacimiento.

Una fiesta sigue a la otra y diciembre es un constante celebrar entre amigos y familiares. Los dominicanos ausentes, que han emigrado a otros países, vuelven para pasar las fiestas en casa y llegan cargados de regalos para todos.
En Santo Domingo, la noche del 24 de diciembre se cena entre familiares y amistades para luego acudir al malecón a compartir todos juntos y al amanecer desayunar con un té de jengibre o chocolate calientes y pan.
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La Misa del Gallo
en la Catedral Primada
La Misa del Gallo se celebra a las 10 de la noche en Santo Domingo en la Catedral Primada de América y en las demás iglesias en cada región.
La Cena de
Nochebuena

El plato central es cerdo entero asado en puya o pierna de cerdo horneada, acompañado de pasteles en hojas (especie de tamales con masa de plátanos rellena de carne y envuelta en hojas de plátano atado con una pequeña soguita). El pavo también tiene su lugar en la masa y cuando los recursos económicos escasos justifican su ausencia, es sustituido por el pollo.
El puerco "asao en su puya" es típico del Cibao (zona Norte de la isla), el pavo relleno de San Juan y San José de Ocoa, y los pasteles en hojas son oriundos del Este. Pero su consumo es general en toda el país.
Menos comunes en el menú moderno son los lerenes y el pan de fruta, aunque mantienen su presencia en la mesa de las fiestas. El manicongo ha prácticamente desaparecido de la tradición culinaria navideña dominicana.
Junto al cerdo y los pasteles, el plato central, o complemento principal es el locrío o moro de guandules, así como la ensalada de papas, la cual incluye típicamente trocitos de manzana y petit-pois, donde el presupuesto familiar lo permite.
Los Reyes Magos, Santa Claus,
El Niño Jesús y la Vieja Belén

En la zona del Cibao, al Norte de la isla, los niños recibían regalos dejados tradicionalmente por el Niño Jesús la noche del 24 de diciembre y descubiertos la mañana del 25. En Santo Domingo, al Sur, y en el Este, eran los Reyes Magos los encargados de dicha tarea el 6 de enero. Advenedizo en la escena es Santa Claus, quien en muchos hogares ahora hace presencia sigilosa la noche del 24 de diciembre y deja regalos para los niños buenos.
En los hogares pobres, cuando los padres no tienen regalos para sus hijos, con el fin de evitar que estos se sientan castigados injustamente por haberse portado mal, La Vieja Belén representa una segunda oportunidad para los niños recibir algún regalo, luego del Día de Reyes.
Lavar la casa
a fin de año

En el pasado se acostumbraba sacar las cosas viejas y lavar con esmero la casa y los pisos. Las escobas viejas eran botadas y colocadas en las esquinas de las casas. Se aprovechaba para limpiar los armarios y guardarropas, deshacerse de las ropas viejas y sustituirlas por nuevas. También se dice traer buena suerte pintar la casa para el nuevo año.
Algunas personas queman incienso, toman baños de hojas (para purificar el cuerpo) o queman incienso (para purificar el espíritu).
Vestidas de Amarillo
el día de Año Nuevo
Enrique Morales, de Santo Domingo, nos cuenta que el dia 1ero de enero se acostumbraba vestir a las niñas de traje amarillo, aunque la costumbre ahora ha caído en desuso.
Los aguinaldos,
cantos y jengibre
Con menos arraigo, pero aún vigente y rescatada por entusiastas jóvenes con frecuencia, la tradición de los aguinaldos consistía en juntarse los amigos e ir cantando villancicos y cantos navideños de casa en casa, al ritmo de tambora, gü y acordeón, siendo recibidos con júbilo por los vecinos que les brindaban té de jengibre, café, chocolate caliente, galletas, empanadas y otras cosas.
El canto más tradicional, entonado a ritmo de merengue y con fondo estridente de la güira dice así: "Ábreme la puerta
que estoy la calle
y dirá la gente
que esto es un desaire.
allá dentro veo
un bulto tapao,
no se si será un lechón asao"


Árboles blancos y
figuras de madera

En pleno Caribe, el último color que verá en nuestro país al natural será el de la blanca nieve tan difundida por el aparato mercadológico anglosajón. Pero ni el calor ni la ubicación geográfica han representado limitación alguna para que el dominicano desarrolle su propia versión de árbol navideño, blanqueado por una mano de pintura cual si fuese la fría nieve y despojado de sus hojas como víctima de la acción de un invierno de regiones templadas inexistente por estos lares. De elaboración local y manual, estos árboles han calado en el gusto del público, en particular por su atractivo precio en comparación con los árboles sintéticos importados del extranjero.
Junto a estos árboles, se han vuelto tradicionales ya las figuras de ángeles, animales típicos, canastas y carretillas (donde curiosamente se coloca el Niño Jesús con frecuencia) de gran tamaño, elaboradas en madera suave retorcida. Si bien algunos hacen venados, dicho animal de otras latitudes ha sido traducido por representaciones del aclimatado y tradicional burro dominicano.
Las figuras son usadas para adornar las casas y oficinas, así como elementos complementarios o centrales en nacimientos de gran tamaño.
Su elaboración es un trabajo artesanal, realizado por el artesano/vendedor con frecuencia en el mismo lugar donde son vendidos en lugares abiertos en las calles de la ciudad.
Las Flores
de Pascua

Una tradición importada pero con extendido arraigo, en particular en las clases media y pudiente, es el uso de las plantas llamadas popularmente como "flores de pascua". Su intenso color rojo, las hace ideales para alegrar cualquier rincón, introduciendo un vivo complemento natural que contrasta a la perfección con la proliferación de adornos sintéticos usados actualmente.
Son usadas para adornar la casa o la oficina y en los lugares públicos, así como sirven de un buen presente navideño para una persona apreciada.

El Milagro de la Navidad
del Banco Popular

Rescatando la vieja tradición de presentar nacimientos vivientes, el Banco Popular en Santo Domingo ofrece todos los domingos del mes de diciembre un impresionante y colorido espectáculo para toda la familia, abierto al público en general y sin costo alguno.
Este ya tradicional espectáculo cuenta con una masiva afluencia del público, que disfruta de una presentación profesional, donde entre coros de villancicos, juegos de luces y actores reales es contada bajo el estrellado cielo de diciembre la historia la Navidad, culminando con un majestuoso despliegue de fuegos artificiales.
Si bien, los adultos aprecian la presentación que llena a todos del espíritu navideño, son los niños los que más disfrutan del mismo por su vistosidad y los animados diálogos, haciéndose evidente de paso la popularidad de los Reyes Magos entre los pequeñines, que aplauden con entusiasmo y claman por ellos cuando entran en escena.
Los Angelitos,
intercambios secretos

Durante el inicio del mes de Diciembre, hasta el día 23, clubes, barrios, empresas, amigos, escuelas, colegios y universidades, celebran intercambios o angelitos entre sus participantes. Típicamente se escriben todos los nombres de los participantes en el intercambio y estos papelitos son distribuidos en forma aleatoria y en secreto. Cada uno será el angelito de otro y le dejará en secreto un regalo diario, semanal o los días establecidos, hasta la celebración de una fiesta o baile final de intercambio, donde se revela la identidad del angelito.
Cimasabor Navideño
y la Llegada de la Navidad
Para la mayoría de los habitantes de Santo Domingo y varias zonas del país, la inminente llegada de la Navidad se convierte en una realidad palpable no cuando empezamos a ver los adornos en las calles y los especiales pre-temporada en las tiendas, o cuando empezamos a sentir un poco de brisa fresca que ilusamente calificamos de "fría" acá en el Caribe, o cuando empezamos a ver el tránsito volverse más caótico y a pesar de todo la gente ser amable, hacerse regalos y sonreir...
Nos damos cuenta de que llegó la Navidad, cuando escuchamos el tradicional slogan del locutor "Cimasabor Navideño" acompañando merengues de años atrás que han sido populares en Navidad. Desde hace varios años la estación Cima (la del slogan "Usted está en Cima"), marca el inicio de la temporada navideña con una programación especial que incluye algunos de los merengues más populares de todos los tiempos, incluyendo los de tema navideños o que fueron populares en Navidades pasadas, llenándonos a todos de alegría, nostalgia y ganas de celebrar y re-celebrar tiempos idos.
Merengues navideños como "Volvió Juanita" de Millie Quezada y "Volvió tu marido" de los Toros Band, acompañados de "Traigo una Juma" del Conjunto Quisqueya y "Abusadora" de Wilfrido Vargas nos ponen a todos a celebrar.
Los Perico Ripiao
(conjuntos de música popular)
En Navidad encontramos (aunque cada vez menos) conjuntos de música típica popular tocando al público a cambio de contribuciones y disponibles para contratación y amenizar cualquier fiesta. Les llamamos perico ripiao y su música se escucha todo el año en el interior del país, en particular las zonas montañosas. Se distingue por llevar un ritmo acelerado, que se baila igualmente acelerado, y una voz estridente del cantante que sobresale sobre la música.
Si bien en años recientes, algunos perico ripiao cuentan con teclados, su composición típica, que facilita su movilidad y el deambular por las calles y plazas de la ciudad es de 3 o 4 músicos que tocan: la güira, la tambora y el acordeón y un cantante.
Los Guloyas
en San Pedro de Macorís
San Pedro de Macorís, ciudad al Sur de la isla, a 45 minutos de la ciudad capital de Santo Domingo, cuenta con una singular tradición cuyos orígenes se remontan al siglo pasado y la presencia de los cocolos, descendientes de esclavos liberados de las antillas inglesas.
El 25 de diciembre una docena de personas se visten con trajes coloridos y vistosos, como los usados en las fechas de Carnaval y Semana Santa. Los colores rojo, amarillo y verde se complementan con espejos, plumas y curiosos sombreros. Látigo en mano representan una especie de lucha y realizan bailes al ritmo de sonidos afroantillanos y pitos.
El público les corresponde con dinero, bebidas y alimentos.
Una tradición similar se ha desarrollado en Sánchez y Samaná (donde curiosamente también abundan los descendientes de esclavos de las antillas inglesas). Allí un grupo de lugareños forman La Parranda de los Pollos y salen cantando por las calles, eligiendo incluso un rey y una reina de las parrandas.
El Fuerte de la Natividad,
un poco de historia
En 1492, las naves del Almirante Cristóbal Colón navegaban por el Norte de la isla de Santo Domingo, pasando el 5 de diciembre por una punta a la que llamaron San Nicolás en honor al santo de ese día, cuya llegada era claro indicio de las próximas celebraciones en honor del nacimiento de Jesús.
Varios días después, mientras navegaban hacia el Este, la carabela Santa María encalló y no le fue posible continuar la travesía. Con su madera y restos, una parte de la tripulación se dirigió a tierra y construyó el primer asentamiento europeo en el Nuevo Mundo. El Fuerte de la Natividad, como le llamaron, se fundó precisamente el 25 de diciembre del 1492.
La Navidad en Mao, Valverde
contada por Juan Miguel y Amauris
A la llegada del mes de noviembre, el aire navideño entra a los hogares de Mao, lleno de alegría, entusiasmando todo el poblado, que lleno de júbilo y alegría adorna sus casas, oficinas, centros comerciales, avenidas, calles y carreteras, con objetos que reflejan la alegría de Navidad (banderines, arbolitos, luces de colores y casitas de madera simulando el Nacimiento del Niño Jesús y el paso de los Reyes Magos).
Los Aguinaldos
En la mayoría de los sectores de esta ciudad, celebran fiestas, donde se preparan platos criollos, como el Asopao, el Salcocho, o se prepara un Gengibre. Durante la preparación de estos, se hacen juegos y bailes hasta servir el plato, y aún después de degustar, la fiesta sigue.
Las Mañanitas
Son fiestas que se celebran durante el mes de diciembre, en donde grupos de personas con tamboras, güiras y acordeón, salen por las calles de Mao en la madrugada tocando y entonando canciones navideñas, haciendo paradas en los hogares, llevando alegría a cada una de las casas. Al final, se degusta el famoso Jengibre en una de las casas visitadas.
Fuegos Artificiales
Los niños y jóvenes se deleitan con el sonar de las explosiones de los fuegos artificiales, claro, con un poco de precaución, para no lastimarse. Algunos de estos fuegos son las quemas de brillos, las patas de gallina, los busca-pies, tumba-gobiernos, mechitas y velas romanas.
Cabe destacar que al inicio de diciembre, se prepara la denominada bazuca, un instrumento fabricado con objetos de metal y activado con Carburo, Agua y Fuego, produciendo una enorme explosión.
La Cena de Nochebuena
y la Misa del Gallo
Tradicionalmente, el 24 de Diciembre se reúne toda la familia, se preparan los mejores platos: ensaladas, pastelones, pan navideño (telera), lasañas, casabes; siendo el plato central la carne de pavo y cerdo Horneadas. Al preparar la mesa, ésta se adorna con manzanas, uvas y otras frutas navideñas, así como vinos y ponches, algunos de estos fabricados por la misma familia
Después de la cena, llegadas las 12:00 de la Noche, la familia se dirige a la iglesia para participar de la Misa del Gallo, donde se celebra el Nacimiento del Niño Jesús.
Fin de Navidad
y Año Nuevo
La llegada del Año Nuevo se celebra el 1 de enero, pero el momento más esperado es el 31 de Diciembre, donde toda la familia se reúne para compartir, brindar, celebrar y expresar cuales son sus deseos para el nuevo año. Al llegar la Media Noche, al sonar el cañonazo que da entrada al nuevo año, todos se confunden en un abrazo de alegría, celebrando la despedida del Viejo Año y la llegada del Nuevo.
La llegada de
los Reyes Magos
Al final de la Navidad y la celebración del Año nuevo, los niños se colocan a la expectativa de lo que podrían recibir de los Reyes Magos el día 6 de enero.
Para esto los niños preparan carta y obsequian cigarros para los Reyes Magos, así como hierbas y agua para sus camellos. Todo esto lo colocan debajo de sus camas con la esperanza de que les sea de agrado y poder recibir un buen regalo.
Recetas
Navideñas
No dejes de ver nuestra sección de recetas de platos típicos navideños, incluyendo platos dominicanos.
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